Page 97 - Остров свободы в моём сердце

1 de enero Derrocamiento de la dictadura de Batista en Cuba (de la declaración del
del ano 1959 partido socialista popular de Cuba)
(texto sobre historia de las relaciones internacionales/ Comp. D. V. Kuznetsov. En cinco
libros. [Recurso electrónico] libro 4. El tiempo más reciente. — Blagoveshchensk: Universidad
pedagógica estatal de Blagoveshchensk, 2013. — 2210 p. p. 1166 – 1167)

[...] Las masas... se hicieron dueñas en las calles de La Habana. Los
trabajadores, encabezados por el Frente Obrero Nacional Unitaro,
declararon una huelga general en La Habana y otras ciudades hasta que se
establezca el poder de las fuerzas revolucionarias....

Esta es la situación hoy. La tiranía y su aparato son barridos. Se ha
creado un gobierno revolucionario provisional, que cuenta con el apoyo
de las fuerzas insurgentes y los partidos y organizaciones revolucionarias.
Este gobierno goza hoy de tal poder y respeto universal como no lo había
gozado ningún otro gobierno en la historia de Cuba. [...]

28 de Discurso de N.S. Khruschov en un mitin de trabajadores en Moscú,
septiembre dedicado al regreso de un viaje a los Estados Unidos
de 1959 (Lector sobre la historia de las relaciones internacionales / texto sobre historia de las
relaciones internacionales/ Comp. D. V. Kuznetsov. En cinco libros. [Recurso electrónico]
libro 4. El tiempo más reciente de Blagoveshchensk, 2013. − 2210 págs. 1150)

[...] Hubo muchas cosas buenas, pero las malas tampoco deben
olvidarse. Este gusano, o más bien el gusano, todavía está vivo y puede
mostrar su vitalidad en el futuro.

¿Por qué estoy hablando de esto? ¿En aras de enfriar las relaciones
entre la Unión Soviética y los Estados Unidos? No. Hablo de esto porque
es necesario saber la verdad para que se pueda ver no solo el lado que
nos agrada, sino también el otro lado, detrás de escena, que no necesita
estar oculto. Hay fuerzas en Estados Unidos que están trabajando contra
nosotros, contra el alivio de la tensión, para la preservación de la Guerra
Fría. Hacerse de la vista gorda ante esto significaría mostrar debilidad
en la lucha contra estas fuerzas del mal, los malos espíritus. No, hay que
exponerlos, hay que mostrarlos, hay que flagelarlos públicamente, hay
que freírlos como diablos en una sartén.

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