Page 35 - Остров свободы в моём сердце

Anclamos en un puerto totalmente desolado.
Nos recibieron cubanos de la provincia de Pinar del
Río. Descargamos los equipos y por la noche nos
trasladamos acompañados por oficiales cubanos al lugar
de despliegue, que posteriormente se cambiaron cinco
veces. Una vez nos visitó Raúl Castro, quien habló de
cómo los revolucionarios en las montañas de la Sierra
maestra se preparaban para la guerra de guerrillas.

Todo el tiempo de nuestro servicio militar estábamos
en constante preparación para la guerra. Recuerdo
que, desde el 22 de octubre de 1962, estuvimos tres
días en servicio de combate, no abandonábamos
nuestras posiciones. los cocineros nos traían las gachas,
dormíamos, cambiándonos unos a otros. Teníamos la
orden de abrir fuego a matar. Milagrosamente todo paso
sin guerra... y después pasaron muchas otras cosas.

El 7 de enero de 1964, el transatlántico turístico
“Mikhail Kalinin”, que venía de México, nos llevó a la
Habana, y el 22 de enero llego a Riga. Nos cambiaron de
ropa a viejos abrigos, botas y nos enviaron a casa.

En el área de

las islas Azores,
por primera
vez subimos
a la cubierta

y enseguida
supimos sobre
el lugar de
destino. Cuba

nos esperaba.

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